A continuación os daremos una serie de consejos sobre qué podemos hacer durante el mes de enero en nuestro huerto o jardín. Estos consejos son adecuados para zonas frías o templadas del hemisferio norte.
Enero es un mes perfecto para planificar la siembra de la nueva temporada y preparar el terreno.
Si seguimos teniendo heladas, intentaremos no pisar el césped, puesto que el frío invernal hace que no se regenere. El corte seguirá siendo algo más elevado de lo habitual, para evitar que el hielo llegue a tocar el suelo. En cuanto al riego en exterior, es prácticamente innecesario debido a la abundancia de las precipitaciones. En caso de encharcamiento, optaremos por un drenaje.
Al finalizar las heladas ya podremos retirar las malas hierbas y las hojas caídas, y podar los arbustos ornamentales y los frutales. En caso de alguna herida, recordar el uso de pasta cicatrizante para evitar un mal mayor.
Con referencia a la siembra, se nos presentan múltiples opciones:
Arbustos de hoja caduca, árboles frutales, algunos tipos de bayas, plantas vivaces.
Zanahoria, tomate, cebolla, remolacha, guisantes, habas, alcachofa, puerro, lechuga, espinacas, rabanitos, acelga, pimiento, apio, berenjena, ajos, nabos, borraja.
Y para finalizar, y no por ello menos importante, la fertilización: para que tus plantas crezcan y florezcan durante la primavera, es fundamental añadir abono. Les aportará los nutrientes necesarios de los que carecen muchos suelos y por supuesto las macetas.